Señor, tu pueblo tiene sed de Ti,
seca esta nuestra alma…desfallece,
con ardiente angustia y frenesí,
en este desierto donde todo perece.
Señor, de la fuente de agua viva
Sacia hoy nuestra alma herida,
de esta sed tan abrasiva,
que consume nuestra vida.
Señor, el desierto es llevadero,
si tu lluvia nos acompaña,
si es que envías aguacero,
por la noche y la mañana.
uma semana cheia de vitórias minha querida.
ResponderEliminarGracias mi Senor por esta sed que despiertas en mi. Porque es precisamente esta sed la que me obliga a buscarte, la que me lleva a anhelar cada dia mas de tu presencia, Muy linda entrada, Un placer conocerte y seguirte. bendiciones!!
ResponderEliminarEstas palabras dan vida a mi Alma. Preciosa entrada!!!
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